Lisboa es la capital portuguesa y ciudad más poblada del país, con más de medio millón de habitantes y cerca de los tres millones en su área metropolitana. Tuvo su esplendor como origen de las expediciones marítimas de la época de los descubrimientos y como puerto seguro de comercio con fenicios y cartagineses, por su ubicación en el interior del estuario del río Tajo.
Igual que la ciudad de Roma, también se fundó sobre siete colinas, lo que ofrece un relieve muy pronunciado a sus calles. Su ubicación en la vertiente atlántica de la península Ibérica, la convierte en la capital más occidental de la Europa continental.
CASTELO DE SÃO JORGE
El Castillo de San Jorge son las ruinas de la antigua muralla que defendía a la población que se asentó en esta colina, la más alta, de la ciudad. Esta posición privilegiada hace que, desde el mirador del castillo, se pueda disfrutar de vistas panorámicas de la ciudad y del estuario del Tajo.
El asentamiento data del siglo VIII a.C., aunque la fortificación es de unos siglos más tarde. En él, se asentaron sucesivamente fenicios, griegos, cartagineses, romanos, suevos, visigodos, musulmanes y, tras la Reconquista, cristianos. De ello, existen restos arqueológicos que corroboran el paso de varias civilizaciones.
Se puede visitar su interior y es totalmente recomendable para amantes de los castillos. Horarios de apertura, compra de entradas y más información en su web: Castelo de S. Jorge.
PANTEÃO NACIONAL
El Panteón Nacional es un edificio religioso destinado a la sepultura de personajes importantes. En él, se encuentran enterrados escritores y presidentes de la República de Portugal; así como la cantante de fados Amália Rodrigues, llamada la reina del fado, o el futbolista Eusébio. En su interior, también se encuentran monumentos funerarios en honor a otros personajes históricos como los navegantes Enrique de Portugal, Vasco da Gama o Pedro Álvares Cabral, primer explorador en llegar a las costas de Brasil.
Construido con mármol coloreado y coronado por una cúpula central, el edificio ocupa el lugar de una antigua iglesia; construida a mediados del siglo XVI. Sus obras comenzaron un siglo después, pero no fueron concluidas hasta mediados del siglo XX, casi 300 años después.
Se puede visitar su interior, donde se encuentran los sepulcros. Horarios de apertura, compra de entradas y más información en su web: Panteão Nacional.
CATEDRAL DA SÉ
La Catedral de Santa Maria Maior de Lisboa, más conocida como A Sé, es la iglesia más antigua de la ciudad. Su construcción de estilo románico se inició a mediados del siglo XII, aunque se ha reconstruido en varias ocasiones en otros estilos arquitectónicos; debido a los diversos terremotos que ha sufrido.
El más importante de ellos, el de mediados del siglo XVIII, destruyó el panteón real y la capilla gótica; afectando a otras estancias por el fuego causado por el propio terremoto. Fue comenzado ya el siglo XX cuando adoptó su forma actual.
PRAÇA DO COMÉRCIO
La Plaza del Comercio es conocida también por Terreiro do Paço, porque es donde se ubicaba el Palacio Real, llamado Paço da Ribeira. El Palacio fue residencia real durante más de dos siglos, al trasladarse desde el Castillo de San Jorge. El terremoto de Lisboa de mediados del siglo XVIII destruyó el palacio, así como obras de arte de su interior, archivo de documentos históricos y cartas de navegación de la época de los descubrimientos.
La actual plaza es el epicentro de la vida urbana lisboeta, y elemento importante en el planteamiento urbanístico que realizó el Marqués de Pombal, tras el terremoto. Está ubicada en la ribera derecha del estuario del Tajo, y cuenta con muelles y un paseo peatonal (Ribeira das Naus); donde se hace imprescindible dar un paseo en la visita a la ciudad.
La plaza está rodeada por edificios con arcadas, que albergan actualmente ministerios, y por el Arco de la Rua Augusta (entrada principal a la Baixa, y de la ciudad). En el centro de la plaza, se encuentra una estatua ecuestre de José I.
ROSSIO
La Plaza Pedro IV, conocida por su anterior nombre Rossio, se encuentra en el centro de Lisboa; conectada con la Plaza del Comercio por la Rua Augusta. La plaza toma nombre del primer emperador de Brasil, tras su independencia de Portugal.
En ella, se encuentra el Teatro Nacional Doña María II, que adopta el nombre de la hija del emperador. El teatro, de los más prestigiosos del país, ocupa el lugar que tuvo la residencia de los mandatarios extranjeros que visitaban la ciudad (llamado Palacio dos Estaús.
Cercana a la esquina noroeste de la plaza, se encuentra la estación de ferrocarril de Rossio; principal conexión de Lisboa con el resto del país y ubicada en el centro de la ciudad. Destaca la fachada de la estación con sus accesos centrales en forma arco de herradura.
PRAÇA DOS RESTAURADORES
Siguiendo con la espina dorsal del centro lisboeta, se encuentra la Plaza de los Restauradores; conmemorando la restauración de la independencia de Portugal, del dominio de la corona española. En el centro de la plaza, un obelisco de 30 metros de altura representa la Libertad y la Victoria.
La parte alta de la plaza da acceso a la Avenida da Liberdade, construida como gran artería en el centro de la ciudad, cubierta casi en su totalidad de arbolado. Tras su construcción, estaba rodeada de muros y portones; por lo que, su acceso estaba restringido a la alta sociedad. Años más tarde, se derribaron dando acceso a toda la población.
Aún conserva algo del estilo original, como el teatro Tívoli, pero la mayoría de edificios han dado paso a hoteles y centros comerciales, en su mayoría tiendas de lujo.
PARQUE EDUARDO VII
Concebido como prolongación de la Avenida da Liberdade, el Parque Eduardo VII se separa de la avenida por la inmensa rotonda de la Plaza del Marqués de Pombal. El nombre del parque es en honor al rey de Inglaterra, que visitó la ciudad a comienzos del siglo XX.
Está construido en pendiente, con un jardín central; el más grande del centro de Lisboa. En la parte alta, junto al jardín de Amália Rodrigues, se encuentra el mirador del parque; con una vista lineal de la ciudad hasta la Baixa y el estuario del Tajo.
ELEVADOR DE SANTA JUSTA
Es el elevador más icónico de Lisboa, y el único de todos los elevadores de elevación vertical; ya que, todos los demás, son tipo funicular. Aunque sigue teniendo su función original, se ha convertido en una atracción para los turistas.
Inaugurado a principios del siglo XX, une la Baixa con el barrio de Chiado. Está construido de una estructura metálica, que adopta algunas técnicas constructivas de la Torre Eiffel; diseñada por el mismo ingeniero que realizó el Elevador do Lavra, el más antiguo de la ciudad.
Actualmente, el elevador tiene un ascensor eléctrico, pero cuando se inauguró era de carbón. Para acceder al punto más alto, de 45 metros de altura, hay que subir unas escaleras de caracol hasta la terraza; donde se puede observar una panorámica de la Baixa.
JARDIM DE SÃO PEDRO DE ALCÂNTARA
El Jardín de San Pedro de Alcántara es uno de los miradores más reconocibles y turísticos de la ciudad. Compuesto por un parque a dos niveles, en la parte superior ofrece un mosaico de azulejo con los edificios más significativos de la panorámica sobre la Baixa, el Castillo de San Jorge, la Sé y el río. Data de mediados del siglo XIX y es un agradable paseo para relajarse, con inmejorables vistas.
Del otro lado de la Baixa, se puede disfrutar la ciudad desde el Mirador de Santa Lucía (con vistas a la Alfama) o desde el Mirador das Portas do Sol, que además cuenta con café restaurante.
PALÁCIO DE SÃO BENTO
El Palacio de San Bento es la sede del parlamento portugués, pero fue construido a finales del siglo XVI como monasterio. Del edificio original, no queda más que algunos vestigios; debido a las reformas que ha ido teniendo en mejoras de su funcionalidad. Aunque se ha conocido por varios nombres más institucionales, se adoptó la nomenclatura actual en honor al nombre del monasterio originario del edificio.
En su parte trasera, en los terrenos del antiguo convento, se construyó la residencia oficial del Primer Ministro portugués; que ha sido habitada desde su construcción ya en el siglo XX.
Se puede visitar su interior, aunque evidentemente, algunas de sus estancias. Horarios de apertura, compra de entradas y más información en su web: Assembleia da República.
PARQUE DAS NAÇÕES
El Parque de las Naciones se construyó para albergar la Exposición Mundial de 1998, y como la infraestructura de otras exposiciones mundiales, se ha quedado perpetua en la ciudad. Situado al este de Lisboa, en el interior del estuario del Tajo, está muy enfocado a actividades náuticas y de naturaleza del estuario y de los océanos, en general.
Los edificios más emblemáticos son la Estación de Oriente, del arquitecto Santiago Calatrava (que marcó el estilo arquitectónico de todos los edificios), la Torre Vasco da Gama (el edificio más alto de Lisboa), el Oceanario de Lisboa (de los más grandes el mundo) o el Pabellón Atlántico (recinto multiusos).
Para llegar, hay conexiones desde la ciudad a la Estación de Oriente; incluso un teleférico que recorre el parque de punta a punta. Para los más inquietos, se alquilan coches de pedales y bicicletas por horas para recorrer el parque.
Más información en su web: Portal das Nações.
TORRE DE BELÉM
Al suroeste de Lisboa, se encuentra Belém, y allí uno de los símbolos de la ciudad más famosos. La Torre de Belém es una fortificación militar, que formaba parte de un triángulo defensivo en el estuario del Tajo, junto al Baluarte de Cascais y el Fuerte de San Sebastián de Caparica (en la otra orilla del río).
Se comenzó su construcción a finales del siglo XV, en plena Era de los Descubrimientos, y tuvo una importante relevancia como puerto de partida de las distintas expediciones. Pese a parecer de dimensiones reducidas, está compuesto de un piso inferior y cinco alturas: el piso inferior se dedicó a albergar la armería y como prisión, en el primer piso se situaba la Sala del Gobernador y los accesos a las torres de vigilancia, el segundo piso era para la Sala de los Reyes y se accede al balcón que da a la terraza del baluarte, el tercer piso tenía la Sala de Audiencias, el cuarto piso estaba destinado al oratorio en la Capilla y, en el quinto piso, está la terraza de la Torre.
Como curiosidad, en la fachada oeste, hay una figura de un rinoceronte; en honor a un animal que arribó al puerto de Belém durante la construcción del complejo, regalo del gobernador de la India portuguesa. El rinoceronte se hizo popular en la época debido a que era el primero en territorio europeo desde la época romana.
Se puede visitar su interior, imprescindible. Horarios de apertura, compra de entradas y más información en su web: Torre de Belém.
MOSTEIRO DOS JERÓNIMOS
El Monasterio de los Jerónimos se encuentra en el barrio de Belém, muy cercano a la Torre de Belém. Declarados conjuntamente Patrimonio de la Humanidad, son de las mayores atracciones turísticas de Lisboa.
Se comenzó a construir a principios del siglo XVI, por orden del rey de Portugal, para conmemorar el retorno de la expedición de Vasco da Gama de su viaje a la India. En este emplazamiento, existía una iglesia donde el navegante y su tripulación pasaron la noche de la víspera de su viaje rezando. Su construcción se financió con los impuestos de las especias orientales y tuvo diversas ampliaciones hasta el siglo XX.
En el Monasterio de los Jerónimos están enterrados varios reyes de Portugal, entre ellos Manuel I (quien lo ordenó construir) y otros personajes relacionados, como el navegante Vasco da Gama.
Imprescindible la visita a su interior, la iglesia y el claustro. Horarios de apertura, compra de entradas y más información en su web: Mosteiro dos Jerónimos.
PADRÃO DOS DESCOBRIMENTOS
El Monumento a los Descubrimientos es llamado padrão, en portugués, por su forma de cruz (como el utilizado por la Corona de Portugal en la Era de los Descubrimientos para reclamar su soberanía sobre los territorios conquistados). Visto por ambos perfiles, el monumento tiene forma de carabela con figuras de la historia de la navegación portuguesa y la realeza; encabezadas por Enrique el Navegante a la cabeza (en la “proa” del barco). Se construyó a mediados del siglo XX, para rememorar el 5º centenario de su muerte.
Al norte del monumento, hay una rosa de los vientos de 50 metros de diámetro, que muestra las rutas de los descubrimientos portugueses de los siglos XV y XVI.
BONUS: CONVENTO DO CARMO
El Convento del Carmen es un antiguo convento que se derrumbó durante el terremoto de Lisboa del siglo XVIII, incluyendo la iglesia gótica. El convento databa de finales del siglo XIV. Tras restaurar parte del convento, especialmente los muros exteriores, las obras se abandonaron con la abolición en Portugal de las órdenes religiosas; quedando totalmente al descubierto toda la nave central.
En la actualidad, las ruinas del convento albergan un museo arqueológico; así como parte de los ejemplares de la biblioteca del convento, también destruida en el terremoto.
QUÉ COMER Y DÓNDE ALOJARSE
La gastronomía portuguesa tiene un carácter muy marítimo, siendo el producto típico por excelencia el bacalao. Se dice que hay 365 recetas distintas con bacalao (como los pasteles de bacalao), una para cada día del año; pero realmente, hay muchas más. Eso sí, casi siempre seco y salado.
En la zona de Belém, el dulce típico son los pasteles de Belém. La receta original se cree que pertenece a los monjes del Monasterio de los Jerónimos y, actualmente, son una marca registrada que se vende en la pastelería Casa Pastéis de Belém.
Como lugares emblemáticos para hacer un descanso, el Café A Brasileira (de los más antiguos de Lisboa) o el Mirador das Portas do Sol, donde se ubica una cafetería con vistas a toda la ciudad. Para comer o cenar, la zona alrededor de la Rua Augusta ofrece todo tipo de restauración con platos típicos. Eso sí, si se quiere disfrutar de un fado en directo, lo mejor es adentrarse en la Alfama y optar por uno de sus restaurantes. Y todo ello, bien marinado con un vino verde.
A la hora de alojarse, a lo largo de la Avenida da Libertade hasta la Plaza del Marqués de Pombal, hay hoteles en ambos lados de la avenida; que resultan interesantes por su cercanía al centro de la ciudad y por estar en línea recta al estuario del Tajo.
ESCAPADAS DESDE LISBOA
PALÁCIO DA PENA
El Palacio da Pena es uno de los castillos más reconocibles del mundo, por sus coloridas fachadas de tonos muy vivos. Fue construido a mediados del siglo XIX, por orden del Príncipe Fernando II de Portugal, y fue una de las residencias oficiales de la familia real portuguesa.
Se mezclan distintos estilos arquitectónicos en su construcción, desde neogótico a neoislámico, pasando por estilos coloniales, manuelinos (típicos de la arquitectura portuguesa) y renacentistas; inspirados en otras construcciones de la región de Extremadura (de Portugal) y del arte morisco y mudéjar español.
Se sitúa en la localidad de Sintra, a unos 30 kilómetros y, si se cuenta con tiempo suficiente para ver Lisboa, es una escapada imprescindible, que se encuentra a muy poco tiempo de recorrido. Horarios de apertura, compra de entradas y más información en su web: Palácio da Pena.
QUINTA DA REGALEIRA
También en la localidad de Sintra, la Quinta da Regaleira es una residencia situada en el casco urbano, de la cual no se tiene constancia de su fecha de construcción, pero su primer propietario conocido la compró a finales del siglo XVII.
Además del Palácio da Regaleira, la quinta cuenta con unos extensos jardines de cuatro hectáreas; así como lagos, grutas, torres y lugares de descanso.
En la parte alta del jardín, se accede al Pozo iniciático; un curioso pozo rodeado de una escalera en espiral con nueve rellanos, que evocan La Divina Comedia de Dante, y comunican la parte alta del pozo con el fondo (decorado con una cruz templaria). Desde el fondo del pozo, se accede a varias grutas que comunican con distintos lugares del jardín. Horarios de visita, entradas y otras curiosidades en su web: Quinta da Regaleira.
RINCÓN CINÉFILO
- 007 al servicio secreto de Su Majestad, de 1969: el agente secreto inglés visitó la capital portuguesa en esta entrega, inspirada en los Alpes suizos, de la saga 007.
- En la ciudad blanca, de 1983: un desertor de la marina suiza se adentra en Lisboa, recorriendo sus calles y barrios; enamorándose en la ciudad.
- Sostiene Pereira, de 1996: la película italiana, inspirada en la novela del también italiano Antonio Tabucchi, relata como un experimentado periodista es asignado a la sección cultural de un periódico lisboeta junto a un joven colaborador.
- Tren de noche a Lisboa, de 2013: la ciudad lusitana es el destino del protagonista de la película, tras conocer a una joven portuguesa en Suiza.
MAPA
Castillo de San Jorge, Santa Maria Maior, Oeste, Portugal
Panteón Nacional, Lisboa, Portugal
Catedral da Sé, Lisboa, Portugal
Praça do Comércio, Santa Maria Maior, Oeste, Portugal
Muelle da Ribeira das Naus, Lisboa, Portugal
Praça Dom Pedro IV, Lisboa, Portugal
Teatro Nacional Maria II, Lisboa, Portugal
Estación Rossio, Lisboa, Portugal
Praça dos Restauradores, Lisboa, Portugal
Avenida da Liberdade, Santo António, Área Metropolitana de Lisboa, Portugal
Parque Eduardo VII, Lisboa, Portugal
Elevador de Santa Justa, Lisboa, Portugal
Convento do Carmo, Lisboa, Portugal
Jardín de São Pedro de Alcántara, Lisboa, Portugal
Mirador de Santa Luzia, Lisboa, Portugal
Palacio de São Bento, Lisboa, Portugal
Parque das Nações, Área Metropolitana de Lisboa, Portugal
Monasterio de los Jerónimos, Belém, Lisboa, Portugal
Torre de Belém, Belém, Lisboa, Portugal
Monumento a los Descubrimientos, Belém, Lisboa, Portugal
Livraria Bertrand, Lisboa, Portugal
Farmácia Açoreana, Lisboa, Portugal
Café A Brasileira, Lisboa, Portugal
Mirador das Portas do Sol, Lisboa, Portugal